Depilación: ¿ cera o crema?

La depilación es un quebradero de cabeza para muchas mujeres y cada vez más hombres. El anti-estético vello obliga, cada vez más, a eliminarlo por métodos más eficaces y duraderos, como la depilación láser que, sin embargo, aún son muy costosos. Las opciones más extendidas para que la piel luzca lisa y sin mácula son la cuchilla de afeitar, la cera (fría o caliente) y la crema. El primero de los métodos es desechado por gran parte de quienes se depilan por su corta duración (apenas un día), y optan por la cera o la crema. A continuación, veremos las ventajas y desventajas de ambos métodos.

Cera: depilación más duradera…y dolorosa

Quien haya pasado por una depilación con cera, habrá comprobado que es el método más efectivo (después del láser) de hacer desaparecer el vello: el pelo es arrancado de raíz, por lo que tarda mucho más en crecer (de dos semanas a un mes) y además aparece más debilitado. La versión caliente es sólo idónea para quienes no sufran problemas de circulación ni tengan la piel sensible: el calor produce enrojecimiento, la aparición ocasional de pequeños granitos y agrava las varices.

La cera tibia es idónea para quienes padezcan problemas circulatorios, ya que el calentamiento es mínimo y los restos son solubles: se eliminan fácilmente con agua o un poco de aceite (de oliva o incluso del que se usa para hidratar la piel de los niños). Las bandas son las más prácticas, ya que son fáciles de transportar (perfectas si vamos de viaje) y de aplicar.

Crema: rápida, indolora…y de poca duración

La crema es un método de depilación que se ha hecho bastante popular por la rapidez en realizarse (entre 3 y 8 minutos) y lo indoloro de su aplicación: las sales de ácido triglicólico disuelven el pelo sin que se sienta molestia alguna (como mucho, un pequeño prurito). Además, hidrata la piel y no hay riesgos de cortes, al contrario de lo que ocurre al usar la cuchilla de afeitar.

No obstante, entre los contras añadidos a este método está su corta duración, ligeramente superior a la de la cuchilla (unos tres días). Además, si tenemos una piel sensible, se ha de usar una crema depilatoria específica y tener especial cuidado con el tiempo indicado para retirar el producto, de lo contrario se producen rojeces.

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