El pecho es una de las zonas más delicadas del cuerpo. Por ese motivo es una de las partes del cuerpo que más se deteriora con el paso de tiempo perdiendo elasticidad y firmeza. Esta falta de firmeza puede presentarse por las continuas variaciones en el peso del cuerpo de la mujer, ya sea por dietas, enfermedades, embarazo, la lactancia, o también por malos hábitos, como malas posturas o falta de sujeción.
Si quieres saber si tu pecho necesita más firmeza haz esta sencilla prueba: coloca un lápiz debajo de una de las mamas, si queda atrapado en el pliegue que forma el seno sobre el abdomen, significa que el tejido esta distendido y necesitas recuperar firmeza. Si el lápiz cae al suelo, significa que su pecho esta tonificado y turgente. Para lucir un pecho firme debes cuidar estos tres aspectos:
- Hábitos diarios: Cuidar la alimentación, darse masajes y baños de agua fría, beber mucha agua…. Ahora que llega el verano no olvidéis utilizar un buen factor de protección en pechos y escote cada vez que tomes sol.
- Ejercicio: Practicar deportes como la natación o fitness acuático dos o tres veces por semana ayudan a una mayor firmeza. Además también resulta muy beneficioso practicar ejercicios aeróbicos con pesas pequeñas (no más de 2kg). Si vas al gimnasio también ayuda mucho realizar ejercicios de pecho para mujeres.
- Productos específicos: Es muy importante mantener los senos hidratados. Hoy en día existen muchísimos productos cosméticos que ayudan a impedir la flacidez: remas, lociones o geles con algas y colágeno son una gran elección para tonificar los pechos. Debes aplicarlas con un suave masaje con movimientos ascendentes. Una buena exfoliación cada 10 días es también muy beneficiosa, aclarando bien la zona con abundante agua fría.
Con un sencillo cambio de chip y un poco de esfuerzo, puedes poner en su sitio los pechos sin necesidad de tratamientos agresivos o cirugía, ¡ y a disfrutar!