Una de las primeras cosas que hacemos como mujeres, tanto al levantarnos como acostarnos es nuestra rutina de limpieza facial. Desde tónicos, desmaquillantes, hidratantes o cremas nutritivas, nuestros botiquines suelen rebosar de productos. En esta nota te contamos algunos de los principales tips que debes tener en cuenta para aprovechar estos momentos en su máxima expresión.
Limpieza, la principal movida para recuperar nuestra tersura
Debes limpiar muy bien tu piel por la mañana, ya sea con un jabón facial recomendado por tu dermatólogo o sino una emulsión limpiadora que te ayude a eliminar todas las impurezas producidas durante la noche. También puedes limpiar la cara con leche limpiadora o con agua micelar. Aplica sobre el rostro y retira con un disco de algodón humedecido. Si utilizas leche desmaquillante, has de refrescar tu rostro con un tónico. Aplícalo con un algodón realizando pequeños «toquecitos». Exfolia tu piel.
Hidratación, fundamental para la piel
Utiliza suero hidratante para refrescar tu piel. Este producto no sólo activa mucho más la hidratación, sino que incluso le aporta a tu rostro un aspecto aterciopelado.Cuando la piel del rostro está hidratada es más flexible y se convierte en una banda elástica en la que rebotan las sustancias nocivas. Una buena hidratación también hace que la piel no se agriete y las líneas de expresión no se queden marcadas. Así reduces la aparición de pequeñas arrugas.
Tonificación para evitar arruguitas
Si bien existen diferentes productos para tonificar tu cutis, aconsejamos fervientemente el hielo. Sólo tienes que aplicarlo utilizando un pañuelo como protector y frotarlo de 7 a 10 segundos por todo el rostro. Es un gran tratamiento facial que se basa en la preparación del rostro, que mediante la aplicación de corrientes farádicas y galvánicas activa la tonificación de la musculatura del mismo, mediante la electroestimulación provocada.
Protección solar
Es indispensable que cuentes con una crema hidratante que además te otorgue protección solar según tu tipo de piel. Luego de colocártela, espera de 5 a 10 segundos para que penetre bien en la piel y seque. Los protectores solares son agentes que ayudan a prevenir que los rayos ultravioletas (UV) lleguen a la piel. También agrava los efectos cancerígenos de los rayos UVB y cada vez más se considera la luz UVA un causante de cáncer de piel.
Una piel limpia es la mejor manera de prevenir infecciones y olores corporales. La mayoría de los jabones, limpiadores faciales, geles de ducha y productos de este tipo han sido probados previamente para garantizar que no provocarán irritaciones o reacciones alérgicas, de ahí que el tipo de productos que escojas sólo deberá responder a preferencias personales.
Recuerda que los excesos de limpieza pueden provocar una pérdida excesiva de grasa en las capas más externas de la piel y producir dermatitis, o bien, acentuar la sequedad de la piel. Además, ten en cuenta que la elasticidad y la tonificación de la piel se pierden con la edad. Puedes mantener la firmeza de tu piel haciendo ejercicio físico regularmente.