Por muchos años hemos visto como el aceite de oliva se toma nuestras cocinas, batidos, máscaras faciales y es agregado a un centenar de preparaciones gracias a la fama que ha adquirido, y no es para menos. Este tipo de aceite posee un gran potencial en grasas saludables como el ácido oleico, o un potente antioxidante como la vitamina E. Es tan bueno para la salud del organismo, que quizá sea el único recomendado por especialistas en el campo de la medicina, pero no todo puede ser perfecto: una cucharadita de este aceite contiene 135 calorías y ese ya es un problema, ¿Qué hacer?: recurrir al aceite acalórico:
¿Qué es el aceite acalórico?
Es un producto que ha tomado mucha fuerza en los últimos años, y está siendo indicado para personas de todas las edades, hombres y mujeres gracias a sus beneficios. Se trata básicamente de una combinación de aceite de oliva y aceite de parafina y su principal característica es su bajo contenido calórico.
¿Y sus beneficios?
A todos nos interesa saber más que todo que se puede y que no se puede hacer con este tipo de grasas, así que conozcámoslo un poco más por medio de sus beneficios.
- La diferencia en número: Como ya te dijimos, una cucharada de aceite de oliva contiene 135 calorías que no son muy recomendables para nadie, de hecho se nos llama a moderar el consumo y disminuirlo sustancialmente, mientras eso sucede, el aceite acalórico solo cuenta con 13,5 calorías, además con un 90% menos de grasas.
- Tiene acción laxante: Ha sido muy demandado para personas con problemas digestivos como el estreñimiento ya que funciona como laxante al lubricar los intestinos y permitir la salida de material de desecho de forma rápida y sin molestias.
- Excelente acción en el sistema circulatorio: Contiene amplios porcentajes de vitamina E, beta-carotenos, y por supuesto ácido oleico que ayudan a retardar la oxidación del cuerpo y sobre todo a prevenir las condiciones relacionadas con padecimientos coronarios.
- Facilidades en conjunto: Si por un lado regula la flora bacteriana y promueve la absorción de oligoelementos, por el otro estimula de forma asertiva la mineralización ósea y aporta polifenoles que mantienes tasas altas de antioxidantes. De esta forma se logra una acción inmediata y real de efectos sobre el organismo.
- El sabor: Uno de sus grandes beneficios es el sabor con el cual deja todas las comidas. Se puede usar en muchas preparaciones como en dietas de adelgazamiento como reemplazo de un aceite en ensaladas, para rociar a carnes y dejarlas con más fácil digestión, en verduras y pescados o en salsas frías como el pesto o la vinagreta. Claro está: debe consumirse crudo, pues como ya te dijimos cuenta con parafina, que al ser calentada puede resultar toxico.
No siempre ha de ser lo mismo con lo mismo, cada día la industria de la alimentación nos sorprende con nuevos productos que son excelentes para suplir nuestras necesidades y hacer excelentes preparaciones, esta vez con el aceite acalórico.