Parece una ironía pero la mejor forma de hacerlo crecer es cortarlo.
El único truco universal para conseguir que el largo del pelo llegue hasta lo que esta tan de moda y se denomina «largo sirena» es tenerlo sano y fuerte. Si el pelo esta debil o estropeado se rompe hasta con apoyarlo con la almohada (cuántas veces te levantas y hay un montón de pelo en ella) y ya ni digamos peinándolo, sobretodo después de recién lavado.
Si tienes el pelo sano, crecerá rápido, pues no se romperá antes de alcanzar tu objetivo. Es por eso que cortarlo cada dos o tres meses (muy poco) ayuda a que crezca más y mejor.
Aparte de esto, mantenerlo nutrido. Ahora en el mercado hay múltiples productos (champús, acondicionadores, mascarillas, revitalizantes, etc) que te ayudarán a hacerlo pero también tienes en casa muchas opciones de hacerte tus propios reparadores. El aceite de oliva es un nutriente natural, que te puedes poner en el pelo, una vez a la semana, durante 30 minutos (y luego enjuagar abundantemente) evitando, eso si, la parte alta de la cabeza. Límitate, con cualquier mascarilla que uses (de mercado o casera) a usarla aplicando más en las puntas que en el cuero cabelludo pero no olvides que necesita nutrición en su conjunto (no caigas en eso de solo las puntas dañadas).
Cambia de cepillo. Deja las fibras sintéticas y vete a por uno grande de fibras naturales. Recomendadas especialmente las de jabalí. La idea es que para desenredar justo después del lavado te peines con un peine de puntas anchas y grandes. Y para el diario utilices el cepillo natural.
Sigue una correcta alimentación. Si estás sana por dentro estarás sana por fuera. No olivides que necesitas todas las vitaminas y que el cuerpo reacciona cuando le falta alguna. Recurre, si lo ves necesario, a complementos vitamínicos que te ayudarán a estar sana y a que se note por fuera.