El día de hoy te brindaremos una guía con los cuidados imprescindibles para tener los pies en el mejor estado. Si bien los pies son una parte importante de nuestro cuerpo en ocasiones no les prestamos demasiado atención. Para obtener buenos resultado solo será necesario dedicarles unos minutos, en muy poco tiempo tiempo se podrán llevar adelante rutinas y tratamientos muy efectivos.
Lavarse los pies todos los días
En ocasiones podemos creer que dejar caer agua con jabón en la ducha diaria es suficiente, este es un error muy común que debemos remediar. Hay que lavarlos de manera exclusiva todos los días empleando un jabón neutro. Este puede convertirse en un agradable momento de relax.
Puedes preparar agua caliente a la que le agregarás sal gruesa, sales esenciales o bicarbonato de sodio. Este ritual ayudará a disminuir la tensión acumulada, permitiendo una buena circulación. Lo ideal es no dejar los pies en el agua por más de 30 minutos.
Otro punto clave es secar muy bien los pies después del baño de relax o de la ducha diaria. Nunca olvidarse de los espacios entre los dedos. Así se podrá evitar la aparición de hongos y sus consecuencias.
Eliminar durezas
Para eliminar las durezas podrás emplear una lima especial para pies o la tradicional piedra pómez. Es importante quitar las durezas y las callosidades después del baño ya que la piel estará más blanda.
Hidratar los pies
Cada vez que puedas hidrata tus pies. Así la piel estará más elástica y resistente, además de más suave al tacto. Al hidratar los pes se generará una barrera frente a posibles infecciones, callosidades y durezas. Te aconsejamos no aplicar crema durante el día, ya que por el uso de calzado y calcetines la absorción no será la correcta, además de generar humedad dentro de los zapatos o zapatillas. Solo hacerlo antes de irte a dormir.
Disfruta de un buen masaje
Tus pies se sentirán súper agradecidos si después de un largo día de trabajo reciben un reconfortante masaje. Si puedes lograr que los masajes se conviertan en una rutina seguramente podrás comenzar a ver muchos beneficios. Se favorecerá la circulación, se aliviarán los dolores, desaparecerán algunos dolores de cuello y de espalda, además de muchos más beneficios que irás descubriendo día a día. Son unos pocos minutos en tu rutina cotidiana que serán un cambio notable en tu vida.
Siempre usa calzado cómodo
Existe mucha variedad en el mundo del calzado, lo que le resulta cómodo a algunos, para otros es bastante incómodo. Es necesario usar calzado que se ajuste al pie como si fuera un guante, sin asfixiarlo ni que se siente oprimido.
Cuidados en el invierno
Al llegar el clima frío recuerda siempre proteger a los pies con el calzado apropiado, lo ideal son los de suela de goma, que tienen mayor capacidad de aislamiento que otros materiales más tradicionales.
Después de pasar unas horas caminando en bajas temperaturas, al llegar a tu hogar deberás evitar la tentación de colocar los pies cerca de la estufa, los mejor es que recuperen la temperatura de manera natural y gradual.