¿Cómo tener unos pies bonitos y suaves?

Después del verano los pies suelen quedar destrozados, sobre todo porque con el calor lo normal es que nos pasemos casi todo el día andando descalzos, además, como hace buen tiempo aprovechamos para sacar esos taconazos que después no nos volvemos a poner en todo el año y la piel de estos se resiente.

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Trucos para tener unos pies bonitos y suaves:

Lavar los pies a diarios:

Vale esto es algo que se da por hecho, pero son muchas las personas que no lo hacen correctamente. Lo ideal es lavarlos con un jabón natural o ecológico y sobre todo hay que tener especial cuidado a la hora de secarlos, porque si no lo hacemos bien y los quedamos mojados nos saldrán hongos.

Eliminar las pieles muertas:

Después del verano la piel de los pies queda bastante fea, por ello lo mejor es optar por un buen exfoliante que elimine las pieles muertas. Si la exfoliación no te elimina todo, otra buena opción es optar por unos calcetines exfoliantes/peeling hoy en día muchas marcas los comercializan y quedan los pies muy bonitos.

Hidratación:

No hay nada mejor para nuestros pies que poner una buena crema hidratante o nutritiva sobre nuestros pies, ahora en Invierno nos vendrá genial ponernos la crema y seguidamente ponernos los calcetines para que el producto no se vaya con las sabanas, pues de esta manera nos hará más efecto.

Masajear los pies:

Si te masajeas los pies a menudo evitarás que se hinchen y la mala circulación. Lo ideal es que lo hagas después de ducharte, que te relajes y disfrutes de este pequeño masaje.

Cuidado al cortar las uñas:

Lo ideal es cortar las uñas de manera horizontal de esta manera evitamos que se encarnen, se deformen, crezcan debilitadas o que se frene el crecimiento de estas. Tanto si te la haces en casa como en un sitio profesional asegúrate de que los productos que se usan son de calidad, por ejemplo, hay que evitar que tengan oxido pues de lo contrario podrían causarnos infecciones.

Cuidado con los zapatos:

Muchas veces queremos tener unos pies saludables, pero nos empeñamos en subirnos a tacones altísimos de aguja y lo cierto es que ambas cosas son totalmente incompatibles. Podemos hacerlo en alguna ocasión porque tengamos un evento importante, pero para el día a día lo ideal es usar zapatos ligeros, planos y por supuesto que sean del número correcto, no intentes usar zapatos pequeños porque te dolerán los dedos si lo haces.

Malos olores:

Por último, pero no menos importante recuerda que es importante que tus pies no huelan mal, para ello es recomendable usar zapatos transpirables y si aun así el olor no cesa, será la hora de usar un buen desodorante para pies. Actualmente en el mercado los podemos encontrar en formato spray, en polvos… solo tienes que ir probando los diferentes formatos hasta que encuentres el más indicado para ti.

Además, si es verano y te pintas las uñas recuerda usar una base para que el esmalte de uñas no estropee tus pies.

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